Posteriormente, la controversial cantante, cuyo nombre original es Judith Bustos, bailó Bad Girls de Donna Summer, junto a el bailarín argentino Iván Anriquez, que se declaró su fan.
Su descoordinada presentación se llevó un puntaje muy bajo de parte del jurado, integrado por 'Pampita', Ángel de Brito, Moria Casán y Marcelo Polino. Este último se animó a lanzar, en su cara, que su baile fue "un disgusto a la retina".
La Tigresa del Oriente no tomó bien las críticas y amenazó con renunciar y tomar el primer avión de regreso a Perú; sin embargo Tinelli dijo que hablará con ella para que cambie de opinión.
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